Respuesta :

Durante los últimos cinco decenios y medio, la agricultura india ha ido experimentando numerosos cambios. La gran transformación tuvo lugar, a mediados de los años sesenta, con la introducción de variedades de cultivos de alto rendimiento. Una innovación que, unida a las inversiones en la infraestructura de riego, la expansión del crédito, los servicios de mercadeo y transformación, indujo a un aumento significativo del empleo de insumos modernos. Este conjunto de circunstancias contribuyó a aumentar la productividad agrícola y a incrementar considerablemente los suministros de diversos productos agrícolas destinados a los mercados más bien que al consumo de las familias rurales. La “revolución verde”, seguida de la “revolución blanca”, la “revolución amarilla” y, posteriormente, la “revolución azul”, llevó a un incremento de la producción de trigo y arroz, leche, semillas oleaginosas, pescado y productos pesqueros, respectivamente.El crecimiento agrícola, determinado por la tasa de crecimiento anual del producto interno neto, aumentó de 1,9 por ciento por año antes del período de la revolución verde (1950-1951 a 1966-1967) a 2,3 por ciento durante la primera fase de la revolución verde (1966-1967 a 1980-1981), y a 3,1 por ciento durante la segunda fase (1980-1981 a 2000-2001). Al mismo tiempo, la participación de la agricultura en el PIB total ha descendido de poco más de la mitad en los comienzos de los años cincuenta a alrededor de una cuarta parte al final de los años noventa. Cambios semejantes se han producido en la cesta de exportaciones del país. La participación de las exportaciones agrícolas en las exportaciones totales del país descendió de 44 por ciento en los comienzos de los años sesenta a alrededor del 14 por ciento al final de los años noventa.Sin embargo, la mayoría de la población de la India continúa dependiendo en un alto grado del sector agrícola para el empleo y como fuente de ingresos. El 72 por ciento de la población, alrededor de 742 millones de personas, vive todavía en zonas rurales, y sus fortunas dependen también considerablemente de lo que sucede en el sector agrícola. Este cuadro, unido a la alta incidencia de la pobreza, preponderantemente un fenómeno rural (el 74 por ciento de los pobres vive en zonas rurales), demuestra la importancia que sigue teniendo el sector agrícola en la economía india.El período de aplicación del AsA coincidió con el proceso de reformas iniciado a partir de 1991 a raíz de la crisis macroeconómica producida como consecuencia del agotamiento de las reservas de divisas y del elevado déficit fiscal. Para hacer frente a esta crisis, se emprendieron reformas fundamentales, que consistieron en la eliminación del antiguo régimen de licencias industriales, la introducción de políticas más liberales en materia de inversiones extranjeras directas, la aplicación de reducciones significativas a los aranceles de los bienes industriales y la devaluación de la moneda.